Breaking News

viernes, 19 de febrero de 2016

Una inscripción de un secutor.

A partir del siglo III la decisión de si matar o dejar morir a un adversario en un especátulo paso a ser de los gladiadores victoriosos.  Unas veces se les dejaba vivir, otras en cambio se ejecutaba al caído.  Esto daba mayor espectáculo a la lucha de gladiadores porque el público nunca sabía cómo iba a terminar la lucha puesto que los dos gladiadores podían ser amigos, enemigos, etc.

Aquí tenemos el caso del secutor Urbicus, en su epitafio (CIL, V, 5933) dejaron inscrito "te moneo ut quis quem vicerit occidat" ("te recomiendo que mates a quien has vencido").  Podemos deducir, por esta frase, que Urbicus en juego anterior decidió dejar con vida al vencido, pero que esto fue la causa de su muerte, puesto que en una lucha posterior el vencido no tuvo clemencia con Urbicus.


Epitafio del siglo II o III d.C.  Estela. 



Sobre la inscripción aparece la imagen de un gladiador que sostiene una espada y un escudo, con un perro a sus pies. 

Traducción: "Para el espíritu de los difuntos. Para Urbicus de Florencia, secutor de primera clase, que combatió 13 veces y que vivió 22 años. También a sus hijas, Olimpia, de 5 meses, y Fortuna. Laurica, su esposa le cree merecedor de ello.  Te recomiendo que mates a quien has vencido."



La estela se encuentra en el Antiquarium de Milán (Italia)

No hay comentarios :

Publicar un comentario

Designed By Published.. Blogger Templates